"¿Cómo ampara la divina Señora a los hombres? Consolando al triste, remediando al pobre, sanando al enfermo, enjugando las lágrimas del huérfano; en una palabra, amparando a todos los que a Ella recurren. ¿No son estas mercedes de María? Sí, hermanos míos, mercedes son de la Virgen y todo cuanto nos ha hecho y nos hace, mercedes suyas son".
(Beato Lorenzo Moreno, Sermón de la Virgen de la Merced)
El mes de septiembre tiene fuertes resonancias mercedarias. Todo el mes está dedicado a María de la Merced, que se celebra con solemnidad el día 24, preparada por una piadosa novena, y que se prolonga el día 25 con el recuerdo de piadosa tradición de su aparición en el coro de Barcelona.
Merced significa don o regalo, es decir, aquello que se ofrece y regala gratuitamente, oponiéndose, por tanto, a las normas y principios del mercado, donde las cosas, e incluso el ser humano, se compran o se venden, según conveniencia o imposición de los más fuertes. Merced es aquello que gratuitamente se ofrece, por amor, a favor de los humanos, a fin de que puedan ser y vivir en libertad y plenitud humana.
María de la Merced no hace referencia a un lugar, como los de Lourdes o Fátima, Montserrat o Guadalupe, aunque estos nombres hayan recibido y también un sentido carismático especial. La Mereced es, mas bien, un título teológico apostólico que está indicando una faceta importante de María, la Madre de Jesús, de manera que puede convertirse en principio de una acción liberadora al servicio de los hermanos cautivos.
Ese título esta vinculado a la vida y obra de san Pedro Nolaco, que más que fundador autónomo de la familia mercedaria aparece como devoto de Mará y promotor de su obra de Merced en el mundo. Así, por impulso del pueblo y elección de los hermanos y hermanas, el grupo empieza a llamarse Orden de la Santa María de la Merced.
Este nombre no fue resultado de una imposición jerárquica, ni elección más o menos arbitraria, sino resultado de un proceso en el que fueron descubriendo que su obra de Merced se encontraba vinculada de manera muy intensa con María, de manera que Ella viene a presentarse como Madre de la Merced y la Merced de María se define como obra de María. Los mercedarios podían haber redimido cautivos sin apelar a la Madre de Jesús o haber mantenido separados los dos elementos (devoción mariana y acción liberadora). Pero los han vinculado de un modo gozoso y comprometido, de manera que María y libertad aparecen unidos en el título de la Merced.
La fiesta litúrgica se celebraba el domingo más cercano al 01 de agosto, fecha de la revelación de María a San Pedro Nolasco, con rezo de oficio y misa de Nuestra Señora de las Nieves. Durante los siglos XVI y SXVII hubo dos fechas distintas para la fiesta de María de la Merced: el 08 de septiembre, oficializada en el capítulo general de Valladolid en 1599 y el 24 de septiembre, que data de 1696, fecha en que, acogiendo la petición del emperador de Austria, el papa Inocencio XII concede el oficio y la misa propios para la Iglesia Universal.
Como una sola familia compartiremos las diferentes iniciativas que han organizado las comunidades mercedarias y como Provincia, para así prepararnos para vivir con profunda alegría la solemnidad de la Virgen de la Merced.
Compartimos una de las tantas prácticas de devoción popular a la Virgen de la Merced: Alojada de la Virgen Visitadora, Chincolco - Petorca
