Mensaje del Padre Carlos Anselmo Espinoza O. de M.
Apreciados hermanos:
No necesito entrar a detallar lo que estamos viviendo en estos días en nuestra ciudad de Valparaíso. Un incendio devorador nos ha dejado ante un desafío gigantesco porque es el momento de la solidaridad que, como dijo el querido Juan Pablo II, es el rostro de la caridad cristiana. Hay mucho dolor, mucha ansiedad, mucha tensión acumulada porque no sabemos a ciencia cierta cuándo terminará el fuego de reactivarse y volver a producir la angustia para tantas personas y familias tanto de las que observan impotentes el avance de las traicioneras llamas o los que ven desaparecer entre ellas sus casas o sus seres queridos. Son horas de inmensa impotencia. No podemos, sin embargo, cruzarnos de brazos. No sirve quejarse y dedicarse a hacer largos análisis. Todo eso puede servir pero hoy estamos ante los miles de rostros sufrientes a causa de esta tragedia donde está Cristo sufriendo.
Quiero invitar a la comunidad educativa, a los ex - alumnos, a los amigos del Colegio San Pedro Nolasco, a los que se sienten en cercanía con la Familia Mercedaria a colaborar en esta emergencia. En este sentido le indico las siguientes acciones para hacer operativa la ayuda. Desde ya agradezco todo aporte y ayuda para responder prontamente a las urgentes necesidades que afectan a muchos hermanos y hermanas de los cerros siniestrados.
No quisiera dejar de mencionarles que una de las primeras formas de ayuda solidaria es la ORACIÓN por los damnificados y por los fallecidos en esta tragedia. Es muy consolador orar por los que están viviendo este dolor y pérdida.
Otra importante ayuda es acercarse al que está viviendo esta situación con el propósito de comunicarle cercanía fraterna, escucha y compasión interior. Era lo que hacía nuestro Señor Jesucristo.
Y ahora le invito a considerar otras acciones solidarias, todas ellas fundadas en el luminoso ejemplo de Nuestro Padre San Pedro Nolasco, el fiel discípulo de Cristo Redentor. “La caridad de Cristo nos urge”, decía San Pablo. No nos hagamos sordos a esta llamada de Semana Santa.
ACCIONES SOLIDARIAS DE AYUDA A LOS DAMNIFICADOS POR EL SINIESTRO DE VALPARAÍSO.
Para ello se solicita
a) Aporte económico en una cuenta corriente abierta para ello que será notificada el lunes 14 a la brevedad.
b) Su finalidad es proveer de recursos económicos para ayudar a reconstruir la casa de personas concretas del colegio cuyos nombres se darán a conocer en cuanto tengamos el catastro.
2.- Ayuda a las familias de la Escuela Sagrada Familia, a cargo de las Hermanas de la Sagrada Familia ubicada en el cerro Merced.
Para ello se solicita
a) Ropa de abrigo niños y niñas en edad escolar (pre-básica a 8º básico) en muy buen estado.
b) Ropa interior nueva para niños y niñas.
c) Calcetas y calcetines en buen estado.
d) Artículos de aseo personal
e) Pañales, ropa de cama, frazadas.
Entregar la ropa clasificada por talla y sexo. Recuerde que todo tiene que estar en buen estado porque hay que considerar la dignidad de la persona siempre.
Entregar la donación en el Colegio San Pedro Nolasco de Valparaíso (Victoria 2762, Valparaíso, Teléfono: 32 – 2214498 o 2252970).
Esta donación se entregará a la Escuela Sagrada Familia.
Para ello se solicita
a) Alimentos no perecibles, conservas, leche, aceite, arroz, fideos, etc.
b) Pañales
c) Ropa de cama
d) Útiles de aseo personal
e) Todo debe estar en buenas condiciones.
Entregar la ayuda en el Colegio San Pedro Nolasco de Valparaíso
Si la ayuda proviene de Santiago, canalizar a través del Colegio San Pedro Nolasco de Vitacura que trasportará todas las ayudas hasta Valparaíso.
Quiero terminar con las preciosas palabras del Salmo 79: “¡Oh Dios!, restáuranos, que brille tu rostro y nos salve. Dios de los ejércitos celestiales, vuélvete: mira desde el cielo, fíjate, ven a visitar tu viña, la cepa que tu diestra plantó y que tú hiciste vigorosa. No nos alejaremos de ti: danos vida, para que invoquemos tu nombre. Señor Dios de los ejércitos celestiales, restáuranos, que brille tu rostro y nos salve.
Reciban un cordial saludo y que el Señor nos bendiga y Nuestra Madre de la Merced nos proteja.
Su hermano en Cristo
Fr. Carlos A. Espinoza Ibacache, O. de M.
Rector del Colegio San Pedro Nolasco de Valparaíso.