La Eucaristía fue presidida por el párroco padre Jaime Nawrath, el cual en su homilía, recordó la importancia de los sacramentos y de los padres siendo los primeros educadores en la fe. Al finalizar la celebración dio gracias y pidió a Dios que guíe a estos jóvenes en el camino de la Fe y que ellos den testimonio con su compromiso permanente con Cristo Jesús en el diario vivir acompañados por sus padres y padrinos, acompañados por nuestra Santísima Virgen de la Merced.
El Bautismo es el fundamento de toda la vida cristiana, el pórtico de la vida en el espíritu y la puerta que abre el acceso a los otros sacramentos. Por el Bautismo somos liberados del pecado y regenerados como hijos de Dios, llegamos a ser miembros de Cristo y somos incorporados a la Iglesia y hechos partícipes de su misión. El Bautismo nos recuerda que somos peregrinos que vamos caminando al encuentro con el Señor.
Fuente: Alejandro Oyarzún, parroquia Nuestra Señora de la Merced, Chillán.